1.
La
Colombicultura es un arte milenario, tan viejo como la cultura humana y la
historia de la domesticación de algunas especies de animales, tales como el
gato y la gallina. Se remonta hasta los orígenes de la humanidad. Enfocado,
según la Real Academia Española de la Lengua, en la crianza, reproducción y entrenamiento
de palomas. Se distingue de la Colombofilia, por su parte, en que esta última
tiene como objetivo no sólo la reproducción de aves, sino su competición en
vuelos prolongados y arduos, principalmente con palomas mensajeras.
Grandes
personajes desde la antigüedad fueron a su vez enormes colombicultores y
colombófilos profesionales: desde faraones egipcios, emperadores sumerios, hititas,
helenos, babilonios. Pasando por pensadores y maestres de diversas hermandades y cofradías espirituales:
artistas y científicos como Leonardo da Vinci, Alexander de Humboldt, Joseph
Breuer, George Gurdjieff, Francesco Petrarca, Lanza de Vasto, León Tolstoi,
Nikos Kazantzakis, Ramón y Cajal y un largo etc. Quienes se sintieron
fascinados por la belleza de éstas aves y coleccionaron grandes cantidades de
ellas.
Esta
historia se desarrolla en una antigua casa, ubicada en el Centro Histórico de
una ciudad común y corriente, ubicada en cualquier parte de Latinoamérica. En
cuya azotea existe un cuidado criadero de variadas razas de palomas, cuyo enigmático
propietario es el principal personaje.
2.
La
casona es una enorme mansión con más de doscientos años de antigüedad, llena de
habitaciones oscuras y húmedas, plantas de sombra, flores raras y espíritus
chocarreros. Ubicada en el centro de alguna añeja capital del Tercer Mundo. En
ella habita Trinidad, un hermético ser, casi autista, quien convive únicamente
con sus palomas y sus gallinas. Lo llaman el Colombicultor, porque se dedica a
cuidar y reproducir palomas, siguiendo una vieja tradición de amantes de las
aves a la cual pertenecieron importantes personajes como el Rey Salomón, Hermes
Trimegisto, el profeta Abraham, Alexander von Humboldt y Charles Darwin.
Dos
mujeres comparten el amor del Colombicultor: Margarita y Lourdes, dos bellas
hermanas, igualmente reservadas y solitarias que él, descendientes de los
primeros habitantes de la casona. Entre los tres conforman una singular
relación poligámica, la cual les provoca
el rechazo de los vecinos católicos y sobre todo, del párroco: el Padre Raúl,
un siniestro personaje, quien formó parte del pasado desconocido de Trinidad.
La
vida de los habitantes de aquella casa se verá alterada cuando descubran que en
ella vive una tercera mujer, de quien nadie tenía noticia, una hermosa matrona,
quien sin embargo, no es de este mundo.
Su
relación con los vecinos y sobre todo con el párroco del barrio, terminará
arrojándolos definitivamente de su hogar, no sin antes vivir una serie de
situaciones anormales y encuentros con seres del Otro Mundo.
Si
te interesa leerla completa, puedes acceder a ella en el siguiente link: